LA DIPLOMACIA Y EL TWITTER

Publicado en por asuntos-internacionales.over-blog.net

 

Observo con atención la manera en que nuestros parlamentarios se están comunicando con sus pares, seguidores, compañeros de bancada política y demás vínculos que hacen a su actividad diaria y no deja de llamarme la atención el fenómeno twitter.

 

Probablemente no pasaría de llamarme la atención si el asunto quedara en el Parlamento o no escapara de la escena de Representantes y Senadores, que si debo de hacer honor a la verdad, hubo una referencia brindada por el Dr.Pedro Bordaberry (en el programa televisivo Código País, primera semana de noviembre) acerca de  su manejo de la herramienta, que me pareció, por lo menos interesante.

 

El Senador anteriormente citado se refirió a la maravilla que significa poder hacer uso de este tipo de tecnología que le permite consultar con sus seguidores o intercambiar ideas con ellos al mismo tiempo que sus compañeros Senadores en el recinto de la Cámara hacen sus exposiciones de motivos. Eso le permite dijo, incluso llegar a tener la posibilidad de rebatir a algún colega con el que disienta, si es que alguien atento tambiénn dentro del universo twitter le ha hecho llegar información útil y pertinente que podrá ser reenviada inmediatamente a la persona con la que está disintiendo.

En ese sentido, no dejó de resultarme sinceramente interesante el fenómeno al que estamos asistiendo, en esta era de la tecnología, al tiempo de la "inmediatez" , así me gusta llamar a este momento histórico por el que atravesamos.

 

Fue de inmediato que vimos por televisión el rescate de los treinta y tres mineros en Chile, fue de inmediato que supimos del deceso del ex Presidente de Argentina, esposo de la actual Presidenta y que pudimos ser partícipes segundo a segundo a través de su duración en tiempo real de los sucesos, en ambos casos.

 

Ahora bien, "lo cortés, no quita lo valiente", el hecho de reconocer que tenemos acceso a the art of technology, lo que sería en buen inglés, lo último en adelantos tecnológicos,  el estar al día con los más recientes descubrimientos o avances científicos, no deja de hacerme sentir obligado a defender las formas, los usos y las costumbres que nos hacen buenos profesionales civilizados y nos convierten en mejores internacionalistas.

 

Considero que en la práctica de la diplomacia, no es acertado hacer uso del twitter de manera que también segundo a segundo estoy pudiendo saber que pensamiento va descendiendo desde el cerebro de un Canciller de la República (no me refiero al de Uruguay) vía sus manos al twitter, todo en fracción de segundos.

 

Si la persona investida en el cargo de Canciller de la República, lo hiciera en su nombre propio y para sus fines personales entre su círculo íntimo, lo respaldo y aplado fervorosamente, en cuanto esa comunicación que sale del aparato sin meditarse profundamente, sin tener un marco de oficialidad o alguna mínima regla de protocolo, representa a una Nación, me resulta absolutamente reprobable.

 

Este es un fenómeno que he observado en las prácticas diplomáticas de algún país de la región que nos involucra e incita a la respuesta por los mismos medios.

 

Tengo plena confianza que el proceder de nuestros representantes acreditados en el exterior, nuestros funcionarios que no están con destino y se encuentran en Cancillería y nuestro Canciller de la República, mantengan las formas de comunicación de rigor y el estilo diplomático que nos ha caracterizado desde el comienzo de nuestra existencia como Estado en el conciento internacional.

 

Si existe una disciplina en la que las palabras, las expresiones, los silencios, la conjunción del conocimiento de otras múltiples disciplinas como la historia, geografía, política, economía, derecho, todo en un ámbito nacional e internacional, además del manejo de otras lenguas, la prudencia y el manejo de los tiempos en el decir verbal o de manera escrita, hacen al éxito o el fracaso de cada negociación, esa es la diplomacia.

Lo que me genera esta gran incógnita; ¿cómo se hace para demostrar todos los aspectos que enumeré anteriormente, en ciento cuarenta y cuatro caracteres, o menos aún?, esa, es la capacidad de un mensaje de twitter.

 

Lic.Mario Tornielli.

 

 

 

 

 

 

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<br /> Interesante reflexión.<br /> <br /> Considero oportunas y reales sus apreciaciones...<br /> <br /> Es sabido que estamos en la "era de las tecnologás"...y seguramente cada vez más expuestos y espectantes ante el fenómeno de la "ciber-diplomacia"...pero francamente no tengo tan claro si podemos<br /> hablar de estos dos conceptos en una misma expresión o es que por el contario debido a los tiempos que vivimos uno es la consecuencia del otro...<br /> <br /> Un saludo y le animo a que continue adelante por estas líneas...<br /> <br /> <br />
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